¿Los días te parecen interminables?, ¿Evitas a tus compañeros por algún problema?, ¿Has perdido el dinamismo que tenias cuando empezaste a laborar?; si respondiste a si a cualquiera de estas preguntas es posible que estés laborando en un ambiente toxico y aquí te enseñaremos 5 señales para descubrir si tu trabajo te esta destruyendo.
Si bien muchas de las razones para detestar tu trabajo pueden ser muy subjetivas y acordes a la personalidad del trabajador muchas otras son indicadores externos de que tu trabajo te esta acabando poco a poco.
Señales para detectar un ambiente laboral toxico
1.- Absentismo e impuntualidad
Parecen dos distintas pero están ligadas la una a la otra; el absentismo es las faltas propias y la de los compañeros y/o superiores; siendo que el desinterés es contagioso y afecta al rendimiento.
Si un “superior” o jefe nunca va a trabajar o llega tarde de manera constante esto se vera reflejado en un creciente desinterés de los trabajadores quienes en general están asiduos a una superación personal y que por el contrario se ven expuestos ante la frustración por la falta de compromiso de sus compañeros y patrones.
2.- Tu jefe o compañeros toman crédito de tu trabajo
Esta es la señal más frustrante que puede existir; pues en muchas ocasiones el patrón no averigua quien es el autor de un buen trabajo; si no que simplemente se limitan a agradecer y saludar con sombrero ajeno; esto es muy común cuando tu jefe inmediato recibe alabanzas por un buen trabajo (realizado por sus obreros).
Si bien la cultura patronal es casi inexistente es necesario en muchas ocasiones tomar el lugar que nos corresponde como responsables de un logro o éxito; “No dejes que tu trabajo siempre hable por ti, podría estar hablando bien de otro”
3.- No hay reconocimiento
No hay más que decir; el patrón debería premiar un buen rendimiento o un buen trabajo realizado, si hay incentivos hay más producción y más ganancias.
4.- Desigualdad
¿Alguna vez te sentiste que por más trabajo que hicieras; nunca tendrás el ascenso al que se perfila el consentido o consentida del jefe? pues esa es la desigualdad que también aparece a la hora de buscar culpables y no soluciones.
5.- Hay Jefe pero no hay Líder
Si en tu oficina o lugar de trabajo se piden las cosas sin un “gracias” o “por favor” por parte de el patrón o se trata piden resultado a base de menosprecios o agresiones verbales; te tenemos noticias tienes un Jefe pero no un Líder.